BIOGRAFÍA
CONSUELO HERNÁNDEZ es pintora española figurativa, en la corriente del Realismo, considerada entre los más relevantes artistas plásticos españoles contemporáneos.
Nacida en Tornavacas (Cáceres) en el seno de una familia de artistas. Su padre, Benicio Hernández, ejerció como funcionario del Ayuntamiento del pueblo y más tarde Director de Caja de Ahorros. Como gran amante del arte, tanto él como su mujer, extremaron el cuidado para que sus tres hijos recibieran desde la infancia una esmerada educación, en cuanto a estudios reglados y en la práctica del arte. Así, a la temprana edad de siete años, constatada la pasión de la pequeña por el dibujo de los objetos y las personas de su entorno y sus habilidades innatas para la expresión plástica, viajaron con ella desde su pueblo natal a Madrid, al Museo del Prado, para que conociera en directo a los grandes maestros españoles: Velázquez, Goya, Murillo, El Greco… Visita tan impactante para la pequeña que salió del Museo con la convicción de que quería “ser pintora”.
De este modo, tanto ella como su hermano Felipe (gran pianista y catedrático de Lengua española), comienzan a desarrollar desde muy pequeños la faceta artística que compatibilizaron con los estudios académicos.
Con una constante formación en los campos del Arte y de las Humanidades, desde su infancia y adolescencia Consuelo Hernández es considerada por sus profesores como la más aventajada alumna, premiando sus trabajos artísticos con la más alta calificación. A la edad de catorce años la joven adolescente se recreaba pintando del natural los atardeceres de las misteriosas calles medievales de Cáceres, ciudad en la que realizó los estudios de Bachillerato.
A los 17 años comenzó sus estudios universitarios en la Universidad de Salamanca que continuó compatibilizando con los estudios artísticos, consiguiendo a los 22 años la licenciatura en Filología Románica y pocos años después la cátedra de Lengua y Literatura. La hermosa ciudad del Tormes, con una ancestral tradición artística y literaria, dejó una profunda huella en Consuelo Hernández, huella que quedó arraigada para siempre en el alma de la pintora.
En relación con sus orígenes y raíces artísticas José María Bermejo, crítico de arte y poeta, escribía en el diario “Hoy” de Extremadura estas palabras extraídas de su artículo “Chelo Hernández: una sensibilidad arraigada” escrito a propósito de su primera exposición individual en los salones del hotel Alfonso VIII de Plasencia:
“La obra pictórica de Chelo Hernández es obra en perpetuo recomienzo, como la mar de Valéry, porque el artista es una mezcla de niño instintivo y de severo autocensor. Se avanza a través de infinitos retornos. Es la duda la que purifica y es la tenacidad la que ahonda…Aquella niña precoz que -alentada por su padre- dibujaba, con tembloroso maravillamiento, el vivo alrededor rural de Tornavacas, dio paso a la adolescente sensitiva que observaba y plasmaba el embrujo de las viejas calles doradas de Cáceres o copiaba con enamorada tenacidad a los grandes maestros españoles…”
La temática de su obra pictórica se centra en personas, seres y objetos de su entorno cotidiano, así como en mundos que, partiendo de la realidad, son creación de la artista. Así lo expresa la misma pintora:“…El cíclico atardecer en un parque; el paraíso soñado de unos campos de cerezos en flor; la masa de personas anónimas que pueblan los andenes del metro de una gran ciudad habituada a la soledad de cada día; una atenta y tranquila mirada
al mar infinito, sin límites; unas sencillas flores; unos edificios que muestran en sus muros el paso del tiempo… seres y objetos todos del pequeño mundo en que vivo y que recreados en el lienzo llegan a configurar ese otro universo propio, diseñado a mi manera, capaz de expresar un pretendido encuentro entre la realidad y el sueño….


Durante los años de juventud, década de los 20 a los 30 años, la artista tantea y busca su estilo propio, que se va definiendo, en principio, con la práctica de una pintura al estilo impresionista, fruto de su admiración por este movimiento y por el conocimiento directo de los grandes maestros impresionistas franceses, Manet, Monet, Renoir, Cézanne… hasta la evolución hacia un tipo de técnica en la que se observa una especial devoción de la artista por el detalle, por la construcción basada en el rigor del dibujo, en la geometría, en el uso del color, de la luz y de la sombra, disciplinas aprendidas y practicadas desde la adolescencia. Así se va configurando un estilo figurativo y realista en el que la artista se siente cómoda.
Su primera exposición individual de pintura la realiza en 1979, en Plasencia, (Cáceres), en la que su obra muestra la influencia de los pintores impresionistas franceses como Monet, Renoir, Cézanne, influencia que va dejando atrás hasta la inmersión en el realismo pictórico, en ocasiones, poético, como han afirmado diversos críticos de su obra: Mario Antolín, Aníbal Núñez, José María Bermejo, José Marín Medina…
La amistad con el grupo madrileño de artistas de la escuela de Antonio López, la admiración por la obra de este gran maestro del Realismo español y la visita a su exposición antológica exhibida en el Museo de Albacete, posteriormente en el Museo Reina Sofía de Madrid, conforman definitivamente el estilo realista y personal al que llega Consuelo Hernández, estilo al que se ha mantenido fiel desde los comienzos de la década de los años 80 hasta la actualidad.
Desde entonces han sido muy numerosas las exposiciones que ha realizado tanto de forma individual como colectiva.
Desde los años 80 su obra ha ido evolucionando no sólo en cuanto a técnicas utilizadas sino también en cuanto al contenido, que tiene un denominador común: el reflejo de su propia evolución vital y la del entorno que la rodea, realidad de la cual parte para trascenderla (en ocasiones) e introducirla en su propio universo imaginado.
Desde el año 2012, etapa de sus exposiciones en China, Shanghái, Beijing, Shenzen… son muy numerosos los reconocimientos y premios recibidos, entre los cuales cabe destacar la Medalla de Oro a la obra y trayectoria artística otorgada por la institución Foro Europa 2001 en abril de 2016.
Invitada y premiada en varios concursos internacionales por la prestigiosa galería de arte Satura Art Gallery de Génova (Italia)
En octubre de 2018 el municipio cacereño de Moraleja le otorga una calle a su nombre.
Seleccionada y premiada, por comisarios y críticos de arte italianos, por su obra y carrera artística en diversas ciudades italianas:
Premio en la II Bienal de Génova. Premio “Caravaggio” en Milán. Premio “Botticelli” en Florencia. Premio “Artist of year 2019” en Mantova.
Premio Medalla de Plata a su obra y trayectoria artística por la histórica y prestigiosa Real Academia francesa Arts-Sciences-Lettres de París en junio de 2019.
(Véase el apartado “Premios y distinciones”)
Numerosos críticos de arte han escrito sobre la obra y trayectoria de Consuelo Hernández. Seleccionamos algunos textos representativos de su hacer pictórico:
En 1995, sobre una de sus exposiciones, José Marín Medina escribía en el suplemento cultural de las Artes del diario ABC: ”Quienes se interesen por la nueva pintura de paisanaje encontrarán en esta exposición a una artista nada común, Consuelo Hernández,en el trance
de su conformación estilística. Perteneciente a las filas juveniles del nuevo realismo, Hernández alcanza su primera madurez en la práctica de un paisaje independiente, desafiante, que, a pesar de la aparente fuerza de su verismo, lo que realmente busca son los dones de la invención imaginativa” Sobre su exposición individual en la galería Paz Feliz de Madrid, en 2007, Carlota de Alfonso escribió en la revista “El Punto de las Artes”:“La obra de Consuelo Hernández trasciende a veces la pura realidad para convertirse en evocaciones y remembranzas, en mundos soñados por la artista, capaces de generar en el espectador sensaciones que permiten transportarle a lugares exóticos o reales, despegados de la cotidianeidad en que se enmarcan“.
Y el crítico de arte Antonio Calderón de Jesús presentaba su reciente exposición en el Palacio de la Isla de Cáceres, organizada por el Ayuntamiento de la misma ciudad en noviembre de 2017, con estas palabras:
“En trance de descubrir nuevos artistas nos encontramos irrremediablemente con Consuelo Hernández, pintora que con sus obras trasciende lo más esquematizado del Arte inteligente, lugar donde normalmente se entiende están posicionados los grandes artistas, por su presencia en los espacios expositivos que siempre suelen estar reservados para pintores importantes.
…Su relevancia como pintora la está llevando a ser una de las artistas españolas con mayor proyección en el campo internacional, debido en parte a sus grandes dotes interpretativas.
…Lo interesante de su obra es su constancia en mantener presente lo más trascendental del Arte del Romanticismo compaginándolo con lo más evolucionado del Arte actual, en cuyos esquemas se basa la línea creativa de esta artista…
El empuje que tiene la obra de esta artista en el campo interpretativo tiene su origen en varios aspectos básicos desarrollados dentro de la misma, definidos por una buena construcción arquitectónica bajo el control de una perspectiva ocular, en la que también están presentes el movimiento, la luz y el color como ingredientes esenciales. Pero no sería este todo el mérito de su obra si no fuera porque en una parte de la misma va impresa una gran carga de Filosofía que presta verosimilitud y profundidad a su temática..
En la actualidad es considerada representativa pintora española, incluida entre los más destacados artistas plásticos españoles contemporáneos.
RELEVANCIA INTERNACIONAL
La obra de Consuelo Hernández se ha exhibido en ferias y festivales internacionales de arte, en Chicago, Hong Kong, Singapur, París, La Haya, Madrid. Igualmente su obra ha sido expuesta en las salas del Instituto Cervantes de Tánger, Rabat, Casablanca, Fez y Tetuán (Marruecos).
En julio de 2012 presentó una selección de pinturas en el marco del Present’Art Festival internacional, Contemporary art, que se exhibió en la Biblioteca Nacional de Shanghái Pudong y en el CEIBS (Art Investment Forum) de Shanghái (China).
Sus exposiciones internacionales continuaron en 2013 en la Bridge gallery de Pekín y en Shenzhen (China), así como en la Gallery-M de Viena (Austria), en el Wison art museum de Shanghái y en el Global Harbor, en el marco del V Festival Internacional Contemporay art de Shanghái (China).
Así como en Italia, Génova, Verona, Florencia, y en Francia.

ESTANCIA EN TÁNGER
En la trayectoria artística de Consuelo Hernández hay que destacar los seis años de su estancia en Tánger (1997-2003) etapa en la que sus pinturas se inspiran en la arquitectura decadente de la época internacional de la ciudad, en especial las que dedica al Gran Teatro Cervantes, serie titulada simbólicamente en su conjunto Estaciones en el Gran Teatro Cervantes de Tánger, constituida por las siguientes pinturas: Noche en el Teatro Cervantes de Tánger, Primavera, Verano, Otoño, Invierno, Barbara Hutton en el Gran Teatro Cervantes, de las cuales las dos primeras fueron pintadas en Tánger y el resto en Madrid, tras haber finalizado su estancia tangerina. Del mismo modo numerosos dibujos y collages, cuya temática es el abandono y la ruina en que se halla sumido el Teatro, representan una denuncia pintada, dirigida a las autoridades responsables, del estado lamentable en que se encuentra un símbolo e icono cultural del pasado de la ciudad.
La exposición individual “Tánger” organizada en el año 2002 por el Instituto Cervantes de Tánger y dedicada íntegramente a la arquitectura racionalista y decadente de la propia ciudad se exhibió en las salas de exposiciones de las principales ciudades marroquíes, Tánger, Rabat, Casablanca, Tetuán, Fez, con gran repercusión en los medios de comunicación.
Durante la etapa tangerina la artista conoce y entabla amistad con escritores, artistas e intelectuales representativos de la ciudad marroquí, como Mohamed Chukri. Años que dejaron una profunda huella, tanto profesional como personal, en la pintora y que han sido objeto de numerosos escritos y publicaciones relativos a su obra tangerina.

Sin considerar su participación en publicaciones relacionadas con su faceta literaria, hay que citar la edición y publicación del libro UN ESCENARIO EN RUINAS-Llamamiento artístico literario por la recuperación del Gran Teatro Cervantes de Tánger, publicado en 2013 con motivo de la celebración del centenario del Gran Teatro Cervantes de Tánger, con la participación de dos escritores españoles y un poeta marroquí. Jesús Carazo, Santiago Martín Guerrero y Mezouar El Idrissi.
El libro tuvo una gran repercusión en los medios de comunicación españoles y marroquíes Su contenido, tanto la temática del relato y la obra de teatro como la poesía y las páginas en las que se reproduce gran parte de las pinturas y dibujos dedicados a Tánger, se centran en el propio Teatro Cervantes con el objetivo de expresar, y a la vez denunciar de modo literario y artístico, el estado de abandono y de ruina en que se encuentra el edificio desde hace más de tres décadas.
Se integran en la obra elementos históricos sobre la constitución de Tánger como ciudad internacional, el contexto mundial de la época, la construcción del Teatro Cervantes, un recorrido por las décadas en que el Teatro se erige como el más significativo icono cultural de África, y su posterior abandono tras la desaparición del acuerdo internacional, así como la anexión de Tánger a Marruecos y el exilio de las familias europeas que habitaban en la ciudad, con elementos de ficción, un relato corto (una historia de amor) y el dolor y la nostalgia de una familia española que se ve obligada a abandonar Tánger a principios de los años 70.
El libro contiene imágenes de pinturas, dibujos y collages, treinta y ocho reproducciones en color de las obras dedicadas al Teatro Cervantes así como una selección de pinturas tangerinas, de Consuelo Hernández
Con la publicación de este libro la artista lideró un movimiento popular en el que se integraron artistas, escritores, músicos, intelectuales, amantes de Tánger, por la restauración del Teatro, que en la actualidad continúa en la misma situación de ruina y a la espera de que ambos estados, español y marroquí, lleguen al acuerdo, tan esperado, de recuperación del edificio.
